Bibliofilia M�dicolegal

Alfonso Galnares Ysern

Acad�mico Numerario de la Real Academia de Medicina de Sevilla

Por su inter�s bibliogr�fico comparativo, traemos a esta secci�n de la revista la versi�n original de los Precis de Medecine Judiciaire de Lacassagne editada en 1878 y la obra que apareci� en Espa�a con el t�tulo de Manual de Medicina Forense y del que podemos comentar un ejemplar de su tercera edici�n de 1946, que por s� solo demuestra el inter�s que debi� alcanzar la obra francesa en nuestro pa�s y que asimismo explica las constantes citas a Lacassagne que figuran en la literatura medicolegal espa�ola.

Lo m�s destacable es que son dos libros distintos, lo que ya se lee en la portadilla del Manual, donde se refiere el texto como traducido y reformado, por M. de Brioude, forense espa�ol y profesor de la Universidad de Sevilla. Las diferencias son tan b�sicas, como que el texto franc�s es un texto ordenado, de una perfecta impresi�n, ilustrado con dibujos de gran expresividad e incluso con planchas en color de gran belleza y que suponemos ins�litas en su �poca, mientras que la edici�n espa�ola, de peor calidad, a pesar de haber transcurrido cerca de setenta a�os, es un libro m�s sin�ptico, dando m�s importancia a las tablas y usando o abusando de llaves, listas y enunciados. Esta diferencia la vemos como que el maestro franc�s escribiendo a los m�dicos para referirles la impresionantes experiencia de solo cuatro a�os en la Escuela de Val-de Gr�ce, mientras que el profesor espa�ol publica una gu�a m�dica del abogado, magistrado, forense, perito, juez de instrucci�n y polic�a, seg�n consta como subt�tulo de la obra. Hoy podr�amos llamar respectivamente a ambos libros Tratado y Breviario.

Los Precis de Medicina Legal constan de una amplia introducci�n hist�rica y se divide, muy de acuerdo con su �poca, en una parte general, que trata de la identificaci�n, las manchas, y el estudio del cad�ver y otra especial dedicada a heridas y contusiones, asfixias y envenenamientos e instinto sexual y funci�n reproductiva. En el texto el propio autor se�ala la importancia de la separaci�n de los temas jur�dicos y m�dicos y alardea de haber sido el primero en ocuparse del estudio de temas entonces in�ditos como la muerte por el calor y el fr�o, la inanici�n y los accidentes anest�sicos.

A nosotros nos parece lo m�s destacable, el que junto con las descripciones m�dicas, en cada caso se expliquen lo que el autor llama consecuencias medicojudiciales y reglas de pericia, lo que apunta a la tendencia actual de distinguir lo que hoy denominamos protocolos de actuaci�n.

El Manual de Medicina Legal, perfecto para los fines que fue concebido, hoy se lee con mucho menor inter�s. Dejamos constancia de la valiosa adaptaci�n a la legislaci�n espa�ola y del hecho de que el traductor, en contra de la apariencia de su apellido, es espa�ol y se muestra orgulloso de ello al se�alar el �xito de un m�todo anal�tico propuesto por Lecha Marzo y al lamentarse de no poder decir lo mismo de otra t�cnica del mismo autor "a pesar de ser su compatriota".

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